Las empresas expertas en control de plagas en Sevilla conocen en profundidad todo tipo de plagas de insectos que nos pueden afectar. Entre ellas, la procesionaria, unas orugas de pinos que se conocen con el nombre de procesionaria porque se van desplazando lentamente y todas juntas. Estas orugas se alimentan mayormente de hojas, pero su presencia en los pinos puede debilitarlos y causar graves daños.
Durante los meses de verano, la procesionaria pone sus huevos en las hojas de los pinos. Tras más de un mes de la puesta, eclosionan, y avanzan a un desarrollo larvario con la llegada de otoño. En el mes de noviembre ya cuentan con nidos donde se cobijarán. Será con la llegada del buen tiempo cuando las orugas saldrán del nido para enterrarse y convertirse en crisálida.
Para animales y niños pequeños son peligrosas, ya que pueden provocar urticaria, algo que saben bien los expertos de control de plagas en Sevilla. Sus pelos pequeños, pero causan graves daños en la cara, el cuello, o las manos. Incluso pueden llegar a causar daños importantes en los ojos y en la boca.
Si queremos evitar que aparezca este insecto, lo ideal es contactar con una empresa que controle esta plaga con anterioridad a que desarrollen sus nidos. A través de trampas se puede capturar a estos animales, gracias a su equipación con feromonas que logran una atracción sobre la oruga. Estas trampas se deben colocar en verano y dejarlas hasta el mes de noviembre colgadas en los pinos. Así, en la mayoría de casos conseguimos reducir la evolución de esta mariposa en crisálida y la aparición de bolsas.
Nosotros, en Exterplagas, realizamos el control de cucarachas o procesionarias en Sevilla y alrededores para evitar o erradicar la aparición de todo tipo de insectos molestos e insalubres para la vida diaria.